LUGAR DE ENCUENTRO DE LOS MISIONEROS DE TODO EL MUNDO
MISIONEROS EN CAMINO: Palabra para la Misión: La Santa Trinidad: manantial de misericordia y de misión
NO DEJES DE VISITAR
www.caminomisionero.blogspot.com
El blog donde encontrarás abundante material para orar y meditar sobre la liturgia del Domingo. Reflexiones teológicas y filosóficas. Videos y música para meditar. Artículos y pensamientos de los grandes guías de nuestra Iglesia y Noticias sobre todo lo que acontece en toda la vida eclesial
Fireworks Text - http://www.fireworkstext.com
BREVE COMENTARIO, REFLEXIÓN U ORACIÓN CON EL EVANGELIO DEL DÍA, DESDE LA VIVENCIA MISIONERA
SI DESEAS RECIBIR EL EVANGELIO MISIONERO DEL DÍA EN TU MAIL, DEBES SUSCRIBIRTE EN EL RECUADRO HABILITADO EN LA COLUMNA DE LA DERECHA

domingo, 19 de junio de 2011

Palabra para la Misión: La Santa Trinidad: manantial de misericordia y de misión


Fiesta de la Santísima Trinidad
Año A - Domingo 19.6.2011 - EUNTES

Éxodo 34,4-6.8-9 / Salmo: Dn 3,52-56 / 2Corintios 13,11-13
Juan 3,16-18

Reflexiones

¿Cómo es Dios por dentro? ¿Cómo vive? ¿Qué hace? ¿Dónde habita?... Son preguntas que todo ser humano se hace, por lo menos en algunas etapas de la vida. A estas y a otras preguntas responde, sobre todo para los cristianos, la fiesta de la Santísima Trinidad. Es la fiesta del “Dios uno en Tres Personas”, como enseña el catecismo. Con eso está dicho todo, pero, a la vez, todo queda por ser explicado y ser entendido, acogido con amor y adorado en la contemplación. Este tema tiene una importancia central para la misión. En efecto, se afirma con facilidad que todos los pueblos

–incluidos los no cristianos– saben que Dios existe, lo mencionan y lo invocan de diferentes maneras; se afirma igualmente que también los ‘paganos’ creen en Dios. Esta verdad compartida

–aunque con algunas diferencias y reservas– hace posible el diálogo entre las religiones, y en particular el diálogo entre cristianos y seguidores de otras religiones. Sobre la base de un Dios único común a todos, es posible tejer un entendimiento entre los pueblos con vistas a acciones concertadas: favorecer la paz, defender los derechos humanos, realizar proyectos de desarrollo humano y social, como ya se viene haciendo en muchos lugares. Sin embargo, para la actividad evangelizadora de la Iglesia, estas iniciativas, por cierto loables y necesarias, no son sino una parte del mensaje cristiano. La familia humana encuentra recursos inagotables para mejorar: partiendo y acogiendo la novedad de Cristo.


Un cristiano no se limita a fundar su vida espiritual solo sobre la existencia de un Dios único, y mucho menos lo puede hacer un misionero consciente de la extraordinaria riqueza del don de Jesucristo, que nos introduce de lleno en el misterio de Dios uno y trino. El Evangelio que el misionero lleva al mundo, además de enriquecer la comprensión del monoteísmo, abre al inmenso y siempre sorprendente misterio de Dios, que es comunión de Personas. Aquí la palabra misterio no alude a verdades escondidas, difíciles de entender, sino más bien a verdades siempre nuevas, por descubrir. En esta materia es mejor dejar la palabra a los místicos. Para S. Juan de la Cruz “Hay mucho que ahondar en Cristo, porque es como una abundante mina con muchos senos de tesoros, que por más que ahonden, nunca les hallan fin ni término, antes van en cada seno hallando nuevas venas de nuevas riquezas acá y allá”. Por su parte, hablándole a la Trinidad, S. Catalina de Siena exclama: “Tú, Trinidad eterna, eres como un mar profundo, en el que cuanto más busco, más encuentro, y cuanto más hallo, más crece la sed de buscarte. Tú eres insaciable; y el alma, saciándose en tu abismo, no se sacia, porque sigue con el hambre de ti, siempre más te desea, oh Trinidad eterna”.


La revelación de Dios uno y trino tiene (en el sentido de ‘debe tener’) consecuencias inmediatas y renovadoras para la vida del creyente: ofrece parámetros nuevos sobre el misterio de Dios, sobre la manera de tejer las relaciones entre las personas humanas, sobre la relación del hombre con la creación... También el diálogo entre las religiones se enriquece con perspectivas nuevas, como lo indican, por ejemplo, las siguientes expresiones. Un autor anónimo ha recogido este diálogo, escueto pero esencial, entre un musulmán y un cristiano:

- Un musulmán dice: “Dios, para nosotros, es uno; ¿cómo podría tener un hijo?”

- Un cristiano responde: “Dios, para nosotros, es amor; ¿cómo podría estar solo?”

El desafío consiste en continuar el diálogo: en el nivel doctrinal y en la vida.


El Dios cristiano es trinitario: es uno pero no solitario; es comunitario. Esta revelación enriquece también el monoteísmo hebraico, islámico y el de las otras religiones. En efecto, el Dios revelado por Jesús (Evangelio) es Dios-amor, Dios que quiere la vida del mundo, Dios que ofrece salvación a todos los pueblos (v. 16-17; cf 1Jn 4,8). Él se revela siempre como “Dios compasivo y misericordioso... rico en clemencia y lealtad” (I lectura, v. 6); “el Dios del amor y de la paz” (II lectura, v. 11); “Dios rico en misericordia” (Ef 2,4). (*)


Todos los pueblos tienen el derecho y la necesidad de conocer este rostro de Dios, que Jesús ha revelado. Y los misioneros tienen el encargo de anunciarlo. Por eso, afirma el Concilio, “la Iglesia peregrinante es misionera por su naturaleza, puesto que toma su origen de la misión del Hijo y del Espíritu Santo, según el designio de Dios Padre” (Ad Gentes 2). En los primeros números del mismo Decreto, el Concilio explica el origen y el fundamento trinitario de la misión universal de la Iglesia, ofreciendo, además, una de las síntesis teológicas más profundas de todo el Concilio.

“¿Dónde habita Dios?” Es otra de las preguntas iniciales. El catecismo responde: “Dios está en el cielo, en la tierra y en todo lugar”. Es verdad, pero hay una respuesta aún más vital y personal. Un día el rabí Mendel de Kotzk preguntó a unos huéspedes cultos: “¿Dónde habita Dios?” Ellos reaccionaron diciendo: “¿Cómo? ¿No lo sabes? ¿Acaso el mundo no está lleno de su gloria?” El rabino, en cambio, replicó: “Dios habita allí donde se le deja entrar”. Dios busca el encuentro personal, la amistad, con cada uno de nosotros. No para bien suyo, evidentemente, sino para el nuestro. Porque esa amistad es para nosotros la única garantía de vida y de felicidad. Él está a la puerta de nuestro corazón y llama; a quien oye su voz y le abre la puerta, Él promete: “Entraré en su casa y cenaré con él y él conmigo” (Ap 3,20). En una intimidad que calienta el corazón, regala vida, lleva a la misión.



Palabra del Papa

(*) «’Señor, Señor, Dios compasivo y misericordioso, lento a la ira y rico en gracia y fidelidad’ (Ex 34,6). Son palabras humanas, pero sugeridas y casi pronuncias por el Espíritu Santo. Nos dicen la verdad sobre Dios: eran verdaderas ayer, son verdaderas hoy y serán verdaderas siempre; nos permiten ver con los ojos de la mente el rostro del Invisible, nos dicen el nombre del Inefable. Este nombre es Misericordia, Gracia, Fidelidad... Aquí radica toda la esencia del cristianismo, porque es la esencia de Dios mismo. Dios es Uno en cuanto que es todo y sólo Amor, pero, precisamente por ser Amor es apertura, acogida, diálogo; y en su relación con nosotros, hombres pecadores, es misericordia, compasión, gracia, perdón».

Benedicto XVI
Homilía en Savona (Italia), 17.5.2008


Siguiendo los pasos de los Misioneros

- 20/6: B. Francisco Pacheco y otros 8 compañeros mártires jesuitas, condenados a la hoguera en Japón (Nagasaki, 1626).

- 20/6: Día Mundial del Refugiado, creado por la ONU (2000).

- 21/6: S. Luis Gonzaga (1568-1591), religioso jesuita italiano, fallecido en Roma, a la edad de 23 años, asistiendo a los afectados por la peste. Es el patrono de la juventud estudiantil.

- 22/6: S. Paulino de Nola (353-431), obispo y poeta latino, nacido en Francia, evangelizó sobre todo la Campania (Italia).
- 22/6: SS. Juan Fisher, obispo de Rochester, y Tomás Moro, magistrado: intrépidos defensores de la fe católica en contra de las pretensiones del rey Enrique VIII, martirizados en Londres (+1535). Alrededor de esta fecha, se hace memoria de otros numerosos mártires de Inglaterra, asesinados en épocas y lugares diferentes. S. Tomás Moro es Patrono de los Gobernantes y de los Políticos.
- 24/6: Natividad de S. Juan Bautista, Precursor del Mesías: anunció su venida pública y preparó su camino, dando testimonio de Él hasta el martirio. Es modelo de los misioneros.

- 24/6: B. María Guadalupe García Zavala (1878-1963), de Guadalajara (México), fundadora, entregada al servicio de los pobres y enfermos.

- 25/6: Memoria del Siervo de Dios Mons. Melchior de Marion Brésillac (1813-1859), misionero francés, obispo en India y más tarde en Sierra Leona, donde murió, tras haber fundado en Lyon la Sociedad para las Misiones Africanas (SMA).

1 comentarios:

Nicodemus dijo...

Muy útil para la meditación, todo lo que dicen sobre la Trinidad. Gracias.


WebJCP | Abril 2007