LUGAR DE ENCUENTRO DE LOS MISIONEROS DE TODO EL MUNDO
MISIONEROS EN CAMINO: María, discípula y misionera
NO DEJES DE VISITAR
www.caminomisionero.blogspot.com
El blog donde encontrarás abundante material para orar y meditar sobre la liturgia del Domingo. Reflexiones teológicas y filosóficas. Videos y música para meditar. Artículos y pensamientos de los grandes guías de nuestra Iglesia y Noticias sobre todo lo que acontece en toda la vida eclesial
Fireworks Text - http://www.fireworkstext.com
BREVE COMENTARIO, REFLEXIÓN U ORACIÓN CON EL EVANGELIO DEL DÍA, DESDE LA VIVENCIA MISIONERA
SI DESEAS RECIBIR EL EVANGELIO MISIONERO DEL DÍA EN TU MAIL, DEBES SUSCRIBIRTE EN EL RECUADRO HABILITADO EN LA COLUMNA DE LA DERECHA

miércoles, 1 de septiembre de 2010

María, discípula y misionera


Por el P. Andrés Mochalski svd, Delegado Episcopal de la Pastoral de las Misiones
Diócesis de Puerto Iguazú, Misiones
Publicado por OMP Argentina

1. INTRODUCCIÓN:

Al final de su reflexión: “El Bicentenario de Mayo”, el Pbro. Luís A. Lahitou, Presidente de la Junta de Historia Eclesiástica Argentina, escribe: "Una característica que debemos resaltar es que, si hubo un punto de apoyo de la fe del pueblo, este fue la devoción mariana que desde los polos tradicionales se irradió a las casas de los más poderosos como a las más humildes moradas dando sustento a una religiosidad que conservó los valores primordiales del Evangelio".

De algún modo María, madre del pueblo argentino, fue la semilla de la cual brotó la nueva evangelización del país en aquellos años tormentosos y que hoy nos vuelve a invitar a una reevangelización asumiendo cada uno de nosotros esa tarea misionera a la cual el Documento de Aparecida nos convoca.

A la luz de estos pensamientos, como también en concordancia con el lema propuesto para el Bicentenario Patrio: “Con María, seamos una Argentina discípula misionera”; quiero compartir con todos ustedes el siguiente suplemento temática. Y ojala que les sirva, como una de tantas herramientas, en servicio a la formación cristiana: personal y comunitaria.

2. EL PROCESO FORMATIVO:

Justamente en medio de los caminos del proceso formativo de los discípulos misioneros y de una sólida espiritualidad trinitaria, los obispos Latinoamericanos y del Caribe, resaltan la figura de María como la discípula perfecta; especialmente unida a Jesús y madre que “fortalece los vínculos fraternos”. Como toda la familia, la Iglesia nace en torno a una madre, que aporta ternura a la convivencia, y “es el mejor remedio para una Iglesia meramente funcional o burocrática. También es la gran misionera y formadora de misioneros, que en la evangelización de América “nos abrió a los dones del Espíritu”.

Ella se acercó a nuestros pueblos “entrando profundamente en el tejido de su historia”. Hoy es maestra de los discípulos misioneros y “nos enseña el primado de la escucha de la Palabra en la vida cotidiana. Particularmente nos enseña a ser acogedores de los pobres y necesitados, con “actitudes de atención, de servicio, de entrega y de gratitud que deben distinguir a los discípulos” (DA, 266 – 272).

Por lo consiguiente, en este proceso formativo de los discípulos misioneros, acercarse a la figura de María es fascinante. Ella es como un prima del cual se irradia la luz del misterio en diversidad de colores. Pues, quien fue la Madre del autor de la Vida, nos enseñará a ser discípulos misioneros, nos dirá lo que tenemos que hacer (ver J 2, 5) para que la obediencia a las instrucciones del Hijo haga brotar el vino bueno y abundante que da vida plena y feliz para todos nuestros pueblos.

3. MARÍA EN LA VIDA DEL PUEBLO:

La presencia de María es viva y fuerte en medio del pueblo. El pueblo católico demuestra su amor y cariño a María, Madre de Jesús de diversas maneras: rezo del Rosario, peregrinaciones y promesas, el mes de María; movimientos marianos, letanías y jaculatorias, congregaciones religiosas, cuadros o imágenes de María en las casas y lugares públicos, etc.

Aquí uno puede preguntarse, ¿qué esta detrás de todo esto? Por un lado, la certeza de que María participa y tiene un papel muy importante entre los que “están vivos en Dios” (“mi Santa Madre, Nuestra Señora, ella está cerca de Dios, está en el cielo”); es Madre de Dios y en ella se puede confiar. Y por el otro, la convicción de que es nuestra madre, está “viva en nosotros”, ella no se olvida y no abandona a sus hijos; a ella siempre podemos recurrir, pues entiende nuestras angustias: protege nuestro matrimonio, libera de las enfermedades, ayuda a encontrar trabajo..... En pocas palabras podemos decir que María consuela, sustenta, protege y está cerca del pueblo.

4. MARÍA EN LA REFLEXIÓN DE LA IGLESIA:

Muchas preguntas sobre ella, realizadas en la catequesis no encuentran respuestas sólo en la Sagrada Escritura. Es necesario recurrir a aquello que la Iglesia, en la Tradición de la fe ha señalado. El Magisterio de la Iglesia (Obispos junto al Papa) definió algunas verdades sobre María: los dogmas. Ellos son como placas de señalización que conducen a la VERDAD: JESÚS y cuando hablan acerca de María, muestran que es una persona humana, muy especial.

A continuación veamos brevemente cuáles son los dogmas, referentes a María:

MARÍA, MADRE DE DIOS: definido por el Concilio de Éfeso, en 431. María es Madre del Hijo de Dios encarnado. No es diosa, pero está en una relación especial con la Santísima Trinidad: es hija agradecida de Dios Padre; es madre, educadora discípula de Dios Hijo y fecundada por Dios – Espíritu Santo e íntima de él es Madre de la Iglesia. Es nuestra Madre.
LA VIRGINIDAD DE MARÍA: definido por el Concilio de Letrán, en 640. Afirma que María concibió a Jesús sin tener relaciones con José, que dio a luz de manera extraordinaria y continuó siendo virgen para siempre. Ella, criatura sencilla, diciendo SÍ, dejándose moldear por el Espíritu Santo, engendrando a Jesús; da lugar a la manifestación gratuita de bondad de Dios. Como María, también todos nosotros, nos podemos abrir a la vida y engendrar nueva vida, fecundando las semillas del Reino en la comunidad y en la sociedad.
LA INMACULADA CONCEPCIÓN: proclamado por Pío IX, en 1854. Confirma lo que la fe y la piedad mariana siempre intuyó: María es pura y sin pecado desde su concepción, por una gracia especial, realizó el sueño de Dios para todas las personas: “Seremos santos e inmaculados frente a Dios” (Ef 1, 4). En ella, nosotros que participamos del misterio del mal y de la iniquidad, encontramos la esperanza y la seguridad de que la gracia de Dios es mayor que el pecado y siempre nos salva.
LA ASUNCIÓN DE MARÍA: en 1950, acogiendo las manifestaciones de la devoción popular que siempre celebró el “sueño profundo de María”, Pío XII proclamó que la persona de María está junto a Jesús, glorificada. Ella nos indica la vida en plena comunión en el amor que nos espera. Como “viva en Dios” ella continúa acompañándonos como madre amorosa.
Sintetizando este punto, sobre María en la reflexión de la Iglesia, podemos afirmar con toda claridad, de que el pueblo y las comunidades cristianas fueron descubriendo, poco a poco, la importancia de ella en la vida cotidiana de los seres humanos. Como también iban entendiendo quién es María para Jesús y su causa, y cuál es el lugar de ella en la comunidad de los seguidores, de los discípulos misioneros de Jesús.

5. ORANDO Y TRABAJANO EL TEMA:

Al final de todo, les propongo que conversemos y respondemos entre todos o también de modo personal.

DESARROLLO:

Un canto mariano apropiado
Textos bíblicos: Lc 1, 26-38; 11, 27-28; J 2, 1-11; 19, 25-27; Hech 1, 14-14; 2, 1-4. Reflexionar los textos, buscando percibir cómo se da la mediación de María en tiempo de Jesús, en tiempo de las primeras comunidades cristianas y cómo esta mediación sucede hoy día.
Fiestas marianas: Reflexionar sobre el significado de alguna fiesta litúrgica mariana, a partir de las siguientes preguntas: ¿cuál es el nombre de la fiesta? ¿qué aspectos de la vida de María resalta la fiesta? ¿cómo esta fiesta está relacionada con la persona de Jesús y también hoy día con nosotros o con nuestras comunidades cristianas?
Cada grupo presenta el resultado de su reflexión (entremedio se puede cantar un verso de una canción mariana conocida por todos).
Culminamos este espacio de conversar y responder con la siguiente oración:
Madre de Dios y Señora Nuestra, enséñanos tu disponibilidad, para que jamás haya resistencia, en nuestro corazón, a la santa voluntad del Padre.

Conocemos tu peregrinar en la fe, por eso te pedimos perseverancia, pues no siempre es fácil asumir el proyecto de Dios en nuestra vida.
María de Nazaret, tú que trajiste el Verbo de Dios en tu corazón y en tu mente, antes de concebirlo en tu seno, ayúdanos a ser morada de Cristo y portadores de vida para el mundo.

María de Belén, viste nacer la Justicia, cuando nos dabas a Jesús; que nunca nos falte la certeza de la fidelidad a Dios.
María de Caná, que afligida conducías a los que sufren hacia Jesús; continúa siendo para nosotros ejemplo de confianza en la gracia que hace brotar el vino nuevo del amor y de la alegría.

María del Calvario, que a la sombra del árbol de la Vida viste la gloria de Dios revelada en el misterio de la Pasión; ayúdanos a creer en la vida que revierte de las tumbas de la muerte.

Madre de la Iglesia, que aguardaste el don del Espíritu del Resucitado con alegre expectativa y te hiciste Don para tu pueblo; continúa caminando con nosotros, para que seamos la Iglesia del testimonio y del amor. Amén.

0 comentarios:


WebJCP | Abril 2007