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MISIONEROS EN CAMINO: Comentario seglar al Evangelio del Domingo 31 de Julio de 2011
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sábado, 30 de julio de 2011

Comentario seglar al Evangelio del Domingo 31 de Julio de 2011


Publicado por Ciudad Redonda

Lectura del santo evangelio según san Mateo 14,13-21

Comieron todos hasta quedar satisfechos

En aquel tiempo, al enterarse Jesús de la muerte de Juan, el Bautista, se marchó de allí en barca, a un sitio tranquilo y apartado. Al saberlo la gente, lo siguió por tierra desde los pueblos. Al desembarcar, vio Jesús el gentío, le dio lástima y curó a los enfermos. Como se hizo tarde, se acercaron los discípulos a decirle: "Estamos en despoblado y es muy tarde, despide a la multitud para que vayan a las aldeas y se compren de comer." Jesús les replicó: "No hace falta que vayan, dadles vosotros de comer." Ellos le replicaron: "Si aquí no tenemos más que cinco panes y dos peces." Les dijo: "Traédmelos." Mandó a la gente que se recostara en la hierba y, tomando los cinco panes y los dos peces, alzó la mirada al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y se los dio a los discípulos; los discípulos se los dieron a la gente. Comieron todos hasta quedar satisfechos y recogieron doce cestos llenos de sobras. Comieron unos cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños.


COMENTARIOS DE SEGLARES

DESDE LA SOCIO-ECONOMÍA
(hombre, casado, con tres hijos, trabaja, miembro activo de dos movimientos sociales, pertenece a comunidad cristiana)

En el pasaje de hoy destacaría dos momentos:
El primero es darse cuenta y conmoverse por las necesidades de nuestros hermanos. Hoy día, en que el consumo y la diversión parecen insensibilizarnos ante tanta desgracia e injusticia, Jesús nos recuerda que hay que estar atentos a las necesidades de los otros, que hoy en día son miles de millones de hermanos que están siendo masacrados por hambre, enfermedades, conflictos, injusticias, todos ellos evitables y consecuencia de un mundo polarizado que sólo beneficia a cada vez menos personas.
En segundo lugar, ante la tentación de “despedirlos” para que cada cual se busque la vida, como le propusieron sus discípulos, Jesús nos invita a hacernos cargo de la realidad y poner encima de la mesa lo que tenemos, nuestra vida y nuestros dones: “dadles vosotros de comer”. Nuestro hermano es nuestra responsabilidad.
Sólo desde la generosidad y la gratuidad de puede construir el Reino de Dios en nuestra tierra.

DESDE LOS ABUELOS
(Matrimonio, jubilados, ocho nietos, pertenecen a grupo de matrimonios)

La lectura del Evangelio de este domingo fortalece nuestra esperanza y nos llena de confianza, por la actitud misericordiosa de Jesús para con el pueblo, pero también la forma en que se dirige a sus discípulos es un aldabonazo a nuestras conciencias, en estos tiempos de crisis y penurias, no solo a nivel local, sino, igualmente, a nivel nacional y mundial. Los cristianos no podemos volver la cara ante los problemas personales y familiares que, tanto el paro como la inmigración, están creando a nuestro alrededor. Reflexionemos sobre las necesidades que deben padecer los que, jugándose la vida de una manera cierta, se arriesgan a cruzar el mar en barcas que no reúnen las más mínimas condiciones y, encima con una carga superior a lo normal, pera venir a un país del que desconocen todo, empezando por el idioma que los aísla y dificulta las condiciones para una normal convivencia. Debemos compartir, con los que más lo necesitan, nuestro tiempo y nuestro dinero. No podemos ser insensibles a la hambruna que, por la pérdida de las cosechas, padecen, AHORA MISMO, en muchos países de África. La insolidaridad adormece nuestras conciencias y nos hace insensibles. Los apóstoles pusieron a disposición de todos lo que tenían y Cristo hizo lo demás. Cuando el amor guía nuestros actos Cristo siempre está a nuestro lado y provee. Pidámosle ser instrumentos dóciles en sus manos, para que, AQUÍ Y AHORA, su Reino prospere y se extienda.
Señor, te pedimos des a nuestros nietos una conciencia recta y solidaria, para que, en la medida de sus posibilidades, estén siempre al quite para tratar de paliar las necesidades de aquellos que las padecen y a nosotros concédenos la posibilidad de ser, para nuestros nietos, ejemplo eficaz para despertar en ellos los inquietudes sociales necesarias para ser seres solidarios.

PARA REZAR
(mujer, soltera, trabaja, pertenece a comunidad cristiana y a movimiento seglar)

Dios Padre Bueno, te damos Gracias
porque Tú nos enseñas hoy a ser generosos
y a compartir con los demás los bienes que tenemos.
Haznos ser instrumentos tuyos y de tu Reino
para que nuestro corazón se engrandezca
cada vez que ayudamos y compartimos
con las personas que más nos necesita cada día.
Ayúdanos, Dios nuestro, a perder el miedo
de desprendernos de los que poseemos,
y ayúdanos a ver con claridad que tan sólo Tú
nos das la seguridad que cada uno necesitamos.
Te pedimos, Dios Padre Misericordioso,
que multipliques en nosotros la fuerza de tu Amor
para ser alimento tuyo en medio del mundo
y ayudar a cada hermano, y especialmente,
a las personas que se encuentran perdidas
a causa de los sufrimientos y dificultades de la vida.
Te damos Gracias, Dios Padre Bueno y Misericordioso,
porque Tú eres Bondadoso y nos permites experimentar
la alegría que se genera en nuestro corazón
cuando logramos compartir vida, dones y bienes.
Te pedimos, Dios Padre Misericordioso,
que Tú multipliques en nosotros tu Amor. Amén.

PARA VIVIR ESTA SEMANA
(matrimonio, tres hijos, él trabaja, el matrimonio pertenece a comunidad cristiana y a movimiento seglar)

La multiplicación de los panes y los peces, siempre nos ha resultado un poco surrealista, complicada de entender, pero es en la experiencia diaria, confiando en la providencia divina, donde ocurren pequeños milagros que nos hacen descubrir que para nada esto es una ficción.
El Señor, a pesar de ser "tan, todo poderoso", tiene un hándicap importante, y es, que no le gusta hacer las cosas sin contar con la participación del hombre. Qué le vamos a hacer, nos hizo así, nos dotó de una libertad absoluta, si nosotros , en la mayoría de los casos, no damos el primer paso, coartamos toda actuación divina.
¡Qué importante responsabilidad¡ , ¿no creéis?. A veces pensamos que no podemos hacer nada por solucionar tantos problemas y situaciones difíciles que cada día pueden llegar a confiarnos. Podemos tener dos tipos de actitudes: una, intentar evadirnos, no querer escuchar, no "calentarnos la cabeza con los marrones de los demás...". La otra actitud es escuchar con el corazón, haciéndonos uno con el que sufre, y, aunque quizás no esté en nuestra mano solucionar esa situación, el hecho de amar al otro escuchándolo, tratando de buscar, si podemos, un remedio, o simplemente, en la mayoría de las veces, orando juntos al Señor por esta situación injusta, esto hace, que pongamos nuestro granito de arena, la parte que necesita el Señor de nuestra parte, para intervenir en la realización del milagro.
Podemos caer en el pesimismo por que vemos que, a nuestro alrededor, a pesar de nuestro esfuerzo, crecen cada vez más las situaciones de injusticia y precariedad, pero esa no debe ser nuestra actitud, por que aunque nos parezca poco, el sólo hecho de escuchar a alguien que se " ahoga en su problema", crea lazos tan fuertes a nivel de relación humana, que la persona se siente confortada, en definitiva amada, y eso psicológicamente es un gran paso.
Aprovechemos también cualquier acción solidaria que durante este verano surja para recaudar dinero para el tercer mundo, por que, casi sin milagro, el dinero recaudado en nuestro mundo, se multiplica por cien allí. También esto nos ayudará a salir de nosotros mismos y que, cada día más, surja automáticamente en nuestras relaciones esta predisposición solidaria de la que hablamos.

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WebJCP | Abril 2007