En la tradicional celebración frente a la Plaza de Mayo, dijo que “en las puertas de las escuelas se vende muerte” y llamó a los responsables a hacerse cargo. Pidió enseñar que la mansedumbre y el diálogo son mejores que la agresión y la crispación.
El arzobispo de Buenos Aires, cardenal Jorge Bergoglio, volvió a denunciar este martes que en las puertas de los colegios porteños se vende droga, y criticó que aunque se diga "qué barbaridad" y "nos escandalizamos" no se toman medidas para prevenir esta situación.
"En las puertas mismas de las escuelas se vende muerte. Hay mucha gente que es responsable y que de alguna u otra manera se les haga llegar la dosis de muerte", aseveró en clara referencia a la droga.
Al presidir la Misa por la Educación en la catedral metropolitana frente a la Plaza de Mayo, el primado argentino sostuvo que "esto es muy evidente. Todos nos escandalizamos y decimos ''''''''qué barbaridad''''", pero, interpeló: "sin embargo, ¿qué se hace? ¿quién le pone remedio a esto?".
Tras considerar que "le estamos dando a las futuras generaciones una cultura de muerte", alertó que "no sólo la droga mata, sino también el egoísmo y el desinterés de los que tenemos la responsabilidad de educar".
Por esto y ante el clima electoral y la controversia en Nación y Ciudad por los adicionales de la Policía Federal en los edificios públicos porteños, Bergoglio exhortó a "enseñar que la mansedumbre es mejor que la agresión, el diálogo mejor que la crispación y el respetuoso escucharse mutuamente es mejor que el insulto".
"Vayamos a casa con un deseo: Abrir el corazón para que salga vida, contagie vida y enseñe a vivir. Y acercarnos a aquel que prisionero de su rigidez y lo acerquemos a la vida y a convivir", concluyó parafraseando el lema de la celebración eucarística.
La tradicional Misa por la Educación llevó por lema "Educar para vivir, educar para convivir" y contó con la presencia de más de 4.000 alumnos de escuelas privadas y públicas de la Ciudad.
Asistieron también el jefe de gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta; Mara Bauer, subsecretaria de Educación nacional, y la viceministra de Educación porteña, Ana Rabaglia, entre otras autoridades.
No fue esta la primera vez que Bergoglio utiliza la Misa por la Educación , para advertir sobre la venta de droga en las proximidades de las escuelas porteñas.
El año pasado, el purpurado afirmó que los valores que se enseñan en la escuela "terminan fracasando en la esquina con el que viene a venderles ''''''''merca''''''''" al reclamarle a los docentes un examen de conciencia sobre los contenidos de la enseñanza. Advertencia que causó "sorpresa" en el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, quien aquella vez concurrió a la ceremonia religiosa.
En 2009, Bergoglio utilizó ese mismo marco para denunciar que un sacerdote porteño fue amenazado de muerte por suscribir un documento en el cual advertía que la droga estaba "despenalizada de hecho" en la villas de emergencias de la Ciudad.
El arzobispo de Buenos Aires, cardenal Jorge Bergoglio, volvió a denunciar este martes que en las puertas de los colegios porteños se vende droga, y criticó que aunque se diga "qué barbaridad" y "nos escandalizamos" no se toman medidas para prevenir esta situación.
"En las puertas mismas de las escuelas se vende muerte. Hay mucha gente que es responsable y que de alguna u otra manera se les haga llegar la dosis de muerte", aseveró en clara referencia a la droga.
Al presidir la Misa por la Educación en la catedral metropolitana frente a la Plaza de Mayo, el primado argentino sostuvo que "esto es muy evidente. Todos nos escandalizamos y decimos ''''''''qué barbaridad''''", pero, interpeló: "sin embargo, ¿qué se hace? ¿quién le pone remedio a esto?".
Tras considerar que "le estamos dando a las futuras generaciones una cultura de muerte", alertó que "no sólo la droga mata, sino también el egoísmo y el desinterés de los que tenemos la responsabilidad de educar".
Por esto y ante el clima electoral y la controversia en Nación y Ciudad por los adicionales de la Policía Federal en los edificios públicos porteños, Bergoglio exhortó a "enseñar que la mansedumbre es mejor que la agresión, el diálogo mejor que la crispación y el respetuoso escucharse mutuamente es mejor que el insulto".
"Vayamos a casa con un deseo: Abrir el corazón para que salga vida, contagie vida y enseñe a vivir. Y acercarnos a aquel que prisionero de su rigidez y lo acerquemos a la vida y a convivir", concluyó parafraseando el lema de la celebración eucarística.
La tradicional Misa por la Educación llevó por lema "Educar para vivir, educar para convivir" y contó con la presencia de más de 4.000 alumnos de escuelas privadas y públicas de la Ciudad.
Asistieron también el jefe de gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta; Mara Bauer, subsecretaria de Educación nacional, y la viceministra de Educación porteña, Ana Rabaglia, entre otras autoridades.
No fue esta la primera vez que Bergoglio utiliza la Misa por la Educación , para advertir sobre la venta de droga en las proximidades de las escuelas porteñas.
El año pasado, el purpurado afirmó que los valores que se enseñan en la escuela "terminan fracasando en la esquina con el que viene a venderles ''''''''merca''''''''" al reclamarle a los docentes un examen de conciencia sobre los contenidos de la enseñanza. Advertencia que causó "sorpresa" en el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, quien aquella vez concurrió a la ceremonia religiosa.
En 2009, Bergoglio utilizó ese mismo marco para denunciar que un sacerdote porteño fue amenazado de muerte por suscribir un documento en el cual advertía que la droga estaba "despenalizada de hecho" en la villas de emergencias de la Ciudad.
0 comentarios:
Publicar un comentario