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Publicado por DABAR
Un texto duro el de hoy. Palabras proféticas de destrucción, desastres y fin. Pero el sentido del texto es animar a sus discípulos, apoyarlos, defenderlos, abrirles a la esperanza de su ayuda y presencia; dejarles claro que con él y por él ganarán su vida.
Jesús no engaña: se avecinan tiempos difíciles y en esos momentos “muchos vendrán usurpando mi nombre”, y habrá grandes desastres, y seréis perseguidos “en mi nombre”, pero no os preocupéis: “yo os daré palabras y sabiduría”… “y ni un cabello de vuestra cabeza perecerá; con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas”.
No sólo nos parece duro, sino que lo es: la historia ha dado buena cuenta de ello. Pero nos quedan muy lejos las persecuciones, los martirios; o están perdidas en el tiempo o en la distancia (todavía sabemos de lugares donde los cristianos son perseguidos, encarcelados y asesinados), pero a nosotros, aquí, se nos desdibujan en la comodidad de nuestras vidas y en la suavidad de nuestro cristianismo.
Dicen que la sociedad está en crisis, que las parroquias están vacías, y la Iglesia tira balones fuera sobre la falta de parroquianos: ¿no será que también ella está en crisis?, ¿no serán estos nuestros tiempos proféticos?
Quizá está cayendo el Templo y muchos discípulos son perseguidos dentro del seno de la estructura jerárquica. No hay cárcel ni martirio, pero sí destierro, olvido e incluso acoso por parte de aquellos que “usurpan su nombre”. Cristianos que así “tienen ocasión de dar testimonio”, cargados de sabiduría que infunde el Espíritu de Jesús. Gente viva de alma despierta y libre: Obispos, teólogos, sacerdotes, religiosos/as, laicos… hombres y mujeres comprometidos con Jesús que, dentro del seno de la Iglesia, siguen luchando porque el Templo siga siendo, y sea siempre, El Espíritu.
¿Y nosotros, cristianos de a pie? Ya sabéis: “Yo te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra,… porque has revelado estas cosas a los sencillos” (Lc 10, 21)
¿Qué hacemos “los sencillos” en estos tiempos proféticos que nos ha tocado vivir?
Mientras decidimos cómo y qué debemos hacer, recemos para que su Espíritu nos acompañe, aliente, ayude,… a ponernos en marcha, a caminar en su nombre, a no desfallecer ante las dificultades, a ser sus testigos en cada una de las facetas de nuestra vida, sin miedo al Templo, con decisión y coraje.
¡Hay tanto por hacer! en nuestras familias, en nuestro trabajo, con nuestros amigos, en la parroquia, con nuestros niños, con nuestros jóvenes, con los adultos que están perdidos o desorientados, con nuestros mayores, con los pobres de Yahvé, en nuestras comunidades,…
¿Todavía no sabemos qué hacer?
Abramos el corazón, ¡no tengamos miedo!, dejemos que su presencia nos llene y su espíritu nos impulse… Todo lo demás “se os dará por añadidura”.
MALAQUÍAS 3,19 20a
Mirad que llega el día, ardiente como un horno: malvados y perversos serán la paja, y los quemaré el día que ha de venir dice el Señor de los ejércitos , y no quedará de ellos ni rama ni raíz. Pero a los que honran mi nombre los iluminará un sol de justicia que lleva la salud en las alas.
II TESALONICENSES 3,7 12
Hermanos: Ya sabéis cómo tenéis que imitar nuestro ejemplo: no vivimos entre vosotros sin trabajar, nadie nos dio de balde el pan que comimos, sino que trabajamos y nos cansamos día y noche, a fin de no ser carga para nadie. No es que no tuviésemos derecho para hacerlo, pero quisimos daros un ejemplo que imitar. Cuando vivimos con vosotros os lo mandarnos: El que no trabaja, que no coma. Porque nos hemos enterado de que algunos viven sin trabajar, muy ocupados en no hacer nada. Pues a esos les mandamos y recomendamos, por el Señor Jesucristo, que trabajen con tranquilidad para ganarse el pan.
LUCAS 21,5 19
En aquel tiempo, algunos ponderaban la belleza del templo, por la calidad de la piedra y los exvotos. Jesús les dijo: «Esto que contempláis, llegará un día en que no quedará piedra sobre piedra: todo será destruido». Ellos le preguntaron: «Maestro, ¿cuándo va a ser eso?, ¿y cuál será la señal de que todo eso está para suceder?» Él contestó: «Cuidado con que nadie os engañe. Porque muchos vendrán usurpando mi nombre, diciendo: “Yo soy”, o bien: “El momento está cerca”; no vayáis tras ellos. Cuando oigáis noticias de guerras y de revoluciones, no tengáis pánico. Porque eso tiene que ocurrir primero, pero el final no vendrá en seguida». Luego les dijo: «Se alzará pueblo contra pueblo y reino contra reino, habrá grandes terremotos, y en diversos países epidemias y hambre. Habrá también espantos y grandes signos en el cielo. Pero antes de todo eso os echarán mano, os perseguirán, entregándoos a las sinagogas y a la cárcel, y os harán comparecer ante reyes y gobernadores, por causa mía. Así tendréis ocasión de dar testimonio. Haced propósito de no preparar vuestra defensa, porque yo os daré palabras y sabiduría a las que no podrá hacer frente ni contradecir ningún adversario vuestro. Y hasta vuestros padres, y parientes, y hermanos, y amigos os traicionarán, y matarán a algunos de vosotros, y todos os odiarán por causa mía. Pero ni un cabello de vuestra cabeza perecerá; con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas».
PRIMERA LECTURA
Un mínimo libro de tres capítulos, el de Malaquías, cierra el ciclo de profetas mayores y menores. Es por ello, en algunas ediciones de la Biblia el último libro del A.T. Para algunos autores es un a modo de resumen final del decir profético: Predilección de Yavé por su Pueblo Israel. Denuncia de una religión cada vez más vacía de contenido y más interesada hasta el punto de pervertir lo más sencillo de ella como son los sacrificios y ofrendas al Señor.
Denuncia el quebranto de la fidelidad conyugal, sobre todo el nuevo matrimonio con mujeres paganas. Pues así resulta que la infidelidad a la mujer primera, algo que ‘el Señor aborrece’ (2,16), es infidelidad a Dios (su descendencia, de mujer pagana, se apartará de Dios).
En el siguiente capítulo denuncia de nuevo la poca generosidad del pueblo con su templo a fin de mantenerlo con dignidad en sus estructuras y en el culto y servicios que conlleva.
Finalmente, como es propio de todos los profetas, el pueblo es invitado a la conversión, No se dice que todo el pueblo se convertirá o será condenado, sino que cada uno tomará su camino. Ya ha llegado en Israel el tiempo de la responsabilidad personal ante el Señor. Así se dice “Los devotos de Yahvé hablaron entre sí. Yahvé escuchó con atención y se escribió en su presencia un libro en memoria de los devotos de Yahvé que honran su nombre” (3,16). Con estos “el Señor será indulgente como es indulgente un padre con el hijo que le sirve” (3,17).
Ya no correrá todo el pueblo la misma suerte, sino que cada uno elige su camino y, con ello, elige la suerte final que le aguarda, como concluye el texto que hoy leemos de Mal 3,19-20a.
SEGUNDA LECTURA
En la exhortación práctica final de este escrito, el autor imita al propio Pablo, tomando quizás prestadas ideas y aun expresiones de sus cartas auténtica. Entre ellas destaca el tema de la imitación del Apóstol, que se había puesto de ejemplo vg. en 1 Ts 2,9 en el asunto que se toca en las líneas siguientes, el trabajo serio.
Porque, efectivamente, entre los destinatarios de la carta hay quienes no trabajan si bien parecen estar muy ocupados metiéndose en lo que no les toca. La frase “muy ocupados en no hacer nada” del v. 11 no es demasiado clara de traducir, pero parece que se refiere a que esas personas se entremeten en asuntos ajenos, lo cual sería verosímil en gente ociosa, la cual, por otra parte, tendría que vivir a costa de otros.
En todo caso lo importante es la necesidad de trabajar. Quizás el no hacerlo en aquel momento era por la espera en la inminente llegada del Señor y consiguiente final de la historia. Sería una forma equivocada de entender la escatología y extraer de ella consecuencias desacertadas por estar fuera de la realidad humana.
Pero sea por lo que fuere, y aun teniendo presente que – en la opinión de algunos – las cosas iban a terminar pronto, hay que trabajar. De modo sencillo y directo, un tanto apodíctico, se dice a tales personas que, si no quieren trabajar, tampoco coman. Lo cual parece un dicho de carácter popular y de común sensatez humana. No se dan motivaciones especiales sino se apela a la experiencia humana general. Es una muestra de cómo la exhortación cristiana y el cristianismo en general no están reñidos con el sentido común.
EVANGELIO
1. Aclaraciones al texto
V.5 Belleza del templo por la calidad de la piedra y los exvotos. El templo era exclusivamente el de Jerusalén. No había otro. Seña de identidad nacional y religiosa de los judíos. Espléndido, deslumbrante, majestuoso. Los exvotos a los que se hace referencia eran piezas de gran valor ofrecidas por príncipes y particulares. Era proverbial la vid dorada de Herodes, con racimos de la altura de un hombre.
V.7 Maestro. Con autoridad para enseñar.
V.8 Usando mi nombre. Haciéndose pasar por Mesías. El momento está cerca. Mejor traducción: Ha llegado el momento. V.9 El final en referencia al fin del mundo.
Vs.12 y 17 Por causa de mi nombre. Por causa de mi, por ser seguidores míos.
V.14 Haced propósito de no preparar vuestra defensa. Una traducción más gráfica en consonancia con el original griego podría ser ésta: meteos en la cabeza que no vais a necesitar preparar vuestra defensa.
V.18 Ni un cabello de vuestra cabeza perecerá. Expresión proverbial indicando protección segura.
V.19 Perseverancia. Ha de entenderse en el sentido de aguante y resistencia en la adversidad. Salvaréis vuestras almas: os ganaréis a vosotros mismos, ganaréis vuestra vida. Una buena traducción de este versículo podría ser la siguiente: Manteneos firmes y alcanzaréis la vida.
2. Texto
Jesús certifica la gravedad de la situación y la tipifica en el Templo: todo él será destruido. La mirada de Jesús se adentra en el porvenir de un pueblo que estaba dando síntomas de fanatismo y de violencia. La mirada atenta y penetrante de Jesús ve el desastre que se avecina sobre Israel.
Pero ante las lógicas preguntas por el cuándo y la señal, Jesús libera a sus palabras de toda especulación sobre el final de los tiempos: Que nadie os engañe. Eso tiene que ocurrir primero. El final no vendrá en seguida.
El interés de Jesús en este texto no es el final de los tiempos sino el duro destino de sus discípulos en el intermedio, mientras ese final llega.
Un intermedio dibujado con crudo realismo: guerras, revoluciones, catástrofes naturales, hambres, epidemias. A este marco general Jesús añade situaciones propias y específicas de sus discípulos por el solo hecho de serlo, por causa de mi nombre, repetido dos veces: persecuciones, juicios, cárceles, traiciones familiares mortales, odios.
El discípulo se encontrará en la tesitura de tener que dar testimonio en los tribunales a favor de Jesús. Todo el empeño de Jesús es dar ánimos a ese discípulo prometiéndole su apoyo y protección explícitos (yo os daré palabras y sabiduría; ni un cabello de vuestra cabeza perecerá) e invitándole a resistir, a no sucumbir, a ganar su vida incluso cuando sea condenado a muerte.
3. Comprensión actualizante
Texto impresionante de realismo y cariño: Jesús volcado en apoyo y defensa de los suyos.
Con la seguridad y la certeza de este apoyo, los discípulos de Jesús son referente de esperanza en el mundo, porque ni saben de miedos ni de cobardías ni viven desde el desamparo o la indefensión. Porque cuentan con Jesús, los discípulos de Jesús viven con perseverancia, con constancia, sin discursos retóricos; tienen la espontaneidad y el frescor del Espíritu de Jesús.
DISTRACCIONES EN EL CAMINO
Lucas tiene obsesión en transmitirnos la visión que de la vida ha recibido en la tradición judía y que él ha visto realizada en Jesús. La vida es un camino que recorremos, en compañía de otros, salpicado de dificultades, sembrado de piedras, lleno de subidas, más que de bajadas, y dirigido hacia un horizonte lejano, inabarcable y, a veces, dudoso.
El recorrido, a su vez, tiene vistas entretenidas que igual despiertan el ánimo como lo adormecen, invitando a su contemplación extasiada. Muchas cosas parecen hechas para hacer pensar, pero las leyendas surgidas en el tiempo y los comentarios de los transeúntes las han convertido en expresiones anímicas de entusiasmo o de frustración.
El símbolo de la belleza y la referencia de la seguridad del futuro, para un judío, era su templo. Era la culminación de todos sus sueños, el adelanto del final, la seguridad en medio del tiempo que pasa y se pierde, la firmeza frente a la tentación de cambiar continuamente de parecer o de convicciones y valores. Sus piedras sillares debían ser el rostro externo de lo perenne que resiste, la imagen ideal de las aspiraciones sentidas. El no va más del camino, de la vida, de la religión.
Habían hecho del continente, con su apariencia, grandiosidad y belleza dulcificada y controlada, la cara radiante del contenido. El símbolo que refiere y señala a lo representado lo habían divinizado y confundido con la realidad. De sus tradiciones culturales y de sus aspiraciones políticas habían querido hacer una muestra de ilusión y de expresión revanchista.
Todo eso, que nosotros también cultivamos, puede venirse abajo. Todo aquello a lo que nos agarramos para alentar ilusiones que levanten los ánimos y nos hagan soñar con futuros proyectados según nuestros deseos, todo lo ilusorio, puede derrumbarse y caer en un plis plas.
UN RETO: SABER EN QUIEN CONFIAR
Hay que tener cuidado con aquello en lo que proyectamos nuestro futuro. Puede ser tan frágil como nosotros, tan transitorio como nuestro paso por la vida, tan efímero como los cohetes de la fiesta, tan volátil como el sueño de una noche de verano, tan firme como una pluma de ave sometida a la fuerza del viento.
El sentido de la belleza, si ha de ser expresión de nuestra realidad presente y futura debe tener algo más que firmeza y mucho más que finitud. Si su cualidad es representar nuestra condición histórica y nuestra esperanza profunda y convencida de un futuro pleno en el que todo el recorrido de la vida tenga un final feliz, no puede quedarse sólo en un sentido superficial de lo bonito ni en un sentido fatal de fracaso.
El caminante de la vida necesita ir descubriendo, junto a las pequeñas ilusiones ficticias que pueden entretenerle un rato, los agarraderos fuertes y definitivos en los que apoyar su cansino y vacilante pie. El suelo en el que echar sus pasos ya cansados de tanto recorrido.
Y entonces descubre a Dios. No a su dios, sino al Dios que se desvela, descubre y manifiesta en el recorrido vital, en las esperanzas profundas, en los anhelos más personales y comunitarios, en las necesidades grandes de los desheredados de la tierra, en las expresiones crudas de la belleza artística, no consumista.
Dios nos ha mandado a su Mensajero para que, con su Palabra, nos diga y dirija a la Verdad de la Vida. Tendremos que hacer un esfuerzo por descifrarla y vivirla. Ganaremos mucho, porque orientará nuestra confianza hacia quien únicamente la merece. Dios.
Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas
(Lc 21, 19)
Preguntas, cuestiones y sugerencias
-¿Hay que hacer algo muy especial para dar sentido cristiano al trabajo?
-¿Es conforme al plan divino el no hacer nada en absoluto?. ¿Porqué no?
-Trabajo como “castigo”. ¿Es ése realmente el sentido del texto de Génesis 3,11?
Es difícil, Señor, mantenerse despierto y no dejarse seducir por los muchos señuelos que, en la vida, atraen nuestra atención con las artes de la publicidad y las ilusiones de las promesas demagógicas. Centra nuestra vista en lo importante, haznos generosos y desprendidos en los templetes que nos construimos. Contágianos de tu confianza y haznos siempre portadores de la verdadera y profunda esperanza que ayuda a luchar y vivir.
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Tu insistencia en el pan y el vino es tu pedagogía en nuestra confusión y despiste. El pan y el vino que constituyen la representación esencial de una vida dura de búsqueda de lo necesario, son el regalo de tu propia presencia en las luchas del vivir cotidiano y hacen presentes también a todos los que trabajan, necesitan y esperan.
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Es un regalo grandioso contar contigo en los pasos de la vida y en los momentos de las decisiones. Eres un gran regalo como compañero infatigable, mensajero de esperanza y guía en los muchos cruces que confunden nuestra orientación. Eres un gran regalo con tu Palabra de aliento, de ánimo, de comprensión y de perdón. Eres un gran regalo como animador de esfuerzos, removedor de compromisos y recordatorio de los débiles que nos necesitan. Eres un gran Dios, afectuoso y cercano, pedagogo y exigente, educador y amigo. Eres, de verdad, un buen Dios. Por eso, con toda la alegría del mundo, porque podemos contar contigo, estamos muy agradecidos y te lo expresamos.
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Nuestra dicha es saber que nos acompañas. Nuestra alegría escuchar tus palabras de ánimo. Nuestra confianza porque no nos abandonas aunque, a veces, parezca que no te sentimos. Haz que nuestro mundo pueda sentir la dicha de tu fe, tu amor y tu esperanza. Entonces será un mundo mejor, más humano.
MONICIÓN DE ENTRADA
Aunque los cristianos de ahora no somos muy versados en liturgias y ciclos, deberíamos saber que estamos celebrando los últimos domingos del año religioso. Dentro de pocas fechas comenzaremos a preparar la Navidad, que marca el comienzo del nuevo año litúrgico. Así como el año astronómico termina en Navidad, el año cristiano comienza entonces.
Por eso, estos domingos nos hablan de lo que parece el final de la historia, del tiempo en el que transcurren nuestras historias personales. También aquí hay una diferencia entre el final astronómico del mundo y el final histórico de cada uno de nosotros en el que percibimos los grandes cataclismos de nuestra realidad personal. Es entonces cuando conviene tener profundas actitudes de confianza en quien únicamente merece la pena ponerla.
ACTO PENITENCIAL
-Tú que nos invitas a vivir con confianza y realismo. Señor, ten piedad
-Tú que eres el compañero de viaje que das esperanza. Cristo, ten piedad
-Tú que transmites aliento, ánimo y ganas de seguir. Señor, ten piedad
Dios nos anima siempre a seguir en la vida con los ojos abiertos y con la confianza puesta en un futuro de amor, perdón y plenitud.
MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA
Un profeta que se llama Mensajero siente la necesidad de despertar la esperanza de su comunidad, agobiada por el cansancio de una vida sin justicia y sin cambios. Dios no deja las cosas como nosotros las construimos, sería demasiado terrible conformarnos con un mundo de desigualdades. Siempre habrá un futuro.
SALMO RESPONSORIAL (Sal 97)
El Señor llega para regir los pueblos con rectitud.
Tañed la cítara para el Señor, suenen los instrumentos: con clarines y al son de trompetas, aclamad al Rey y Señor.
El Señor llega para regir los pueblos con rectitud.
Retumbe el mar y cuanto contiene, la tierra y cuantos la habitan; aplaudan los ríos, aclamen los montes al Señor, que llega para regir la tierra.
El Señor llega para regir los pueblos con rectitud.
Regirá el orbe con justicia y los pueblos con rectitud.
El Señor llega para regir los pueblos con rectitud.
MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA
Cuando hay crisis de trabajo es un sarcasmo que haya quienes se aprovechan de las subvenciones para los desempleados robándoselo a quienes las necesitan. El trabajo es para la vida, también para la solidaridad y el servicio comunitario.
MONICIÓN A LA LECTURA EVANGÉLICA
Para Lucas, como para nosotros y para Jesús, la vida es un camino hacia un horizonte posible y necesario. En él hay mucho en juego. Muchas distracciones. Muchas ilusiones. ¿Hay esperanza? ¿En quién confiar?
ORACIÓN DE LOS FIELES
Las necesidades y problemas del mundo nos abruman, por eso buscamos algo con qué ilusionarnos. Dios nos invita a no olvidar nunca la realidad.
-Por quienes nos reunimos en esta comunidad que quiere cultivar la esperanza y despertar la solidaridad, para que vivamos de acuerdo a nuestra fe. Roguemos al Señor.
-Por la comunidad de los creyentes cristianos presente en el mundo entero, para que seamos portadores de reconciliación, perdón y ánimo. Roguemos al Señor.
-Por los más necesitados de la tierra, presentes con Dios en el pan que vamos a consagrar, para que sean el centro de nuestra celebración y de nuestra preocupación. Roguemos al Señor.
-Para que los jóvenes descubran la importancia de sentir a Dios como compañero del viaje de la vida. Roguemos al Señor.
-Por los pueblos que deben decidir su situación y sus gobernantes, para que lo vivan con seriedad y solidaridad. Roguemos al Señor
-Por quienes viven más agudamente las consecuencias de la crisis y su situación se alarga sin salida. Roguemos al Señor.
Oración: Dios, Padre bueno, mira nuestra súplica y ayúdanos a encontrar las motivaciones que puedan empujarnos a trabajar contigo en hacer un mundo más sensible y humano. Por Jesucristo Nuestro Señor.
DESPEDIDA
Tenemos la suerte de vivir la fe en una comunidad que repite y celebra la esperanza. En ella encontramos las ayudas para seguir caminando. Le damos gracias a Dios y vamos a tratar de hacerles llegar a otros las motivaciones que nos reaniman.
CANTOS PARA LA CELEBRACION
Entrada. Queremos construir una ciudad en paz (1CLN-732); Cristo nos une en torno a su altar (disco “15 Cantos para la Cena del Señor”); Somos un pueblo que camina (1CLN-719).
Salmo. Aleluya, el Señor es nuestro rey (1CLN-515).
Aleluya. Canta aleluya al Señor.
Ofertorio. Padre eterno (1CLN-H 1)
Santo. De Aragüés (1CLN-I 2).
Comunión. Alabad al Señor; El Señor es mi fuerza; Cerca está el Señor (1CLN-731); Te conocimos (2CLN-O 25).
Final. Entre tus manos (1CLN-65)
Director: José Ángel Fuertes Sancho •Paricio Frontiñán, s/n• Tlf 976458529 Fax 976439635 • 50004 ZARAGOZA
Tlf. del Evangelio: 976.44.45.46 - Página web: www.dabar.net - Correo-e: dabar@dabar.net
Jesús no engaña: se avecinan tiempos difíciles y en esos momentos “muchos vendrán usurpando mi nombre”, y habrá grandes desastres, y seréis perseguidos “en mi nombre”, pero no os preocupéis: “yo os daré palabras y sabiduría”… “y ni un cabello de vuestra cabeza perecerá; con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas”.
No sólo nos parece duro, sino que lo es: la historia ha dado buena cuenta de ello. Pero nos quedan muy lejos las persecuciones, los martirios; o están perdidas en el tiempo o en la distancia (todavía sabemos de lugares donde los cristianos son perseguidos, encarcelados y asesinados), pero a nosotros, aquí, se nos desdibujan en la comodidad de nuestras vidas y en la suavidad de nuestro cristianismo.
Dicen que la sociedad está en crisis, que las parroquias están vacías, y la Iglesia tira balones fuera sobre la falta de parroquianos: ¿no será que también ella está en crisis?, ¿no serán estos nuestros tiempos proféticos?
Quizá está cayendo el Templo y muchos discípulos son perseguidos dentro del seno de la estructura jerárquica. No hay cárcel ni martirio, pero sí destierro, olvido e incluso acoso por parte de aquellos que “usurpan su nombre”. Cristianos que así “tienen ocasión de dar testimonio”, cargados de sabiduría que infunde el Espíritu de Jesús. Gente viva de alma despierta y libre: Obispos, teólogos, sacerdotes, religiosos/as, laicos… hombres y mujeres comprometidos con Jesús que, dentro del seno de la Iglesia, siguen luchando porque el Templo siga siendo, y sea siempre, El Espíritu.
¿Y nosotros, cristianos de a pie? Ya sabéis: “Yo te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra,… porque has revelado estas cosas a los sencillos” (Lc 10, 21)
¿Qué hacemos “los sencillos” en estos tiempos proféticos que nos ha tocado vivir?
Mientras decidimos cómo y qué debemos hacer, recemos para que su Espíritu nos acompañe, aliente, ayude,… a ponernos en marcha, a caminar en su nombre, a no desfallecer ante las dificultades, a ser sus testigos en cada una de las facetas de nuestra vida, sin miedo al Templo, con decisión y coraje.
¡Hay tanto por hacer! en nuestras familias, en nuestro trabajo, con nuestros amigos, en la parroquia, con nuestros niños, con nuestros jóvenes, con los adultos que están perdidos o desorientados, con nuestros mayores, con los pobres de Yahvé, en nuestras comunidades,…
¿Todavía no sabemos qué hacer?
Abramos el corazón, ¡no tengamos miedo!, dejemos que su presencia nos llene y su espíritu nos impulse… Todo lo demás “se os dará por añadidura”.
CONCHA MORATA
concha@dabar.net
concha@dabar.net
DIOS HABLA
MALAQUÍAS 3,19 20a
Mirad que llega el día, ardiente como un horno: malvados y perversos serán la paja, y los quemaré el día que ha de venir dice el Señor de los ejércitos , y no quedará de ellos ni rama ni raíz. Pero a los que honran mi nombre los iluminará un sol de justicia que lleva la salud en las alas.
II TESALONICENSES 3,7 12
Hermanos: Ya sabéis cómo tenéis que imitar nuestro ejemplo: no vivimos entre vosotros sin trabajar, nadie nos dio de balde el pan que comimos, sino que trabajamos y nos cansamos día y noche, a fin de no ser carga para nadie. No es que no tuviésemos derecho para hacerlo, pero quisimos daros un ejemplo que imitar. Cuando vivimos con vosotros os lo mandarnos: El que no trabaja, que no coma. Porque nos hemos enterado de que algunos viven sin trabajar, muy ocupados en no hacer nada. Pues a esos les mandamos y recomendamos, por el Señor Jesucristo, que trabajen con tranquilidad para ganarse el pan.
LUCAS 21,5 19
En aquel tiempo, algunos ponderaban la belleza del templo, por la calidad de la piedra y los exvotos. Jesús les dijo: «Esto que contempláis, llegará un día en que no quedará piedra sobre piedra: todo será destruido». Ellos le preguntaron: «Maestro, ¿cuándo va a ser eso?, ¿y cuál será la señal de que todo eso está para suceder?» Él contestó: «Cuidado con que nadie os engañe. Porque muchos vendrán usurpando mi nombre, diciendo: “Yo soy”, o bien: “El momento está cerca”; no vayáis tras ellos. Cuando oigáis noticias de guerras y de revoluciones, no tengáis pánico. Porque eso tiene que ocurrir primero, pero el final no vendrá en seguida». Luego les dijo: «Se alzará pueblo contra pueblo y reino contra reino, habrá grandes terremotos, y en diversos países epidemias y hambre. Habrá también espantos y grandes signos en el cielo. Pero antes de todo eso os echarán mano, os perseguirán, entregándoos a las sinagogas y a la cárcel, y os harán comparecer ante reyes y gobernadores, por causa mía. Así tendréis ocasión de dar testimonio. Haced propósito de no preparar vuestra defensa, porque yo os daré palabras y sabiduría a las que no podrá hacer frente ni contradecir ningún adversario vuestro. Y hasta vuestros padres, y parientes, y hermanos, y amigos os traicionarán, y matarán a algunos de vosotros, y todos os odiarán por causa mía. Pero ni un cabello de vuestra cabeza perecerá; con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas».
EXEGESIS
PRIMERA LECTURA
Un mínimo libro de tres capítulos, el de Malaquías, cierra el ciclo de profetas mayores y menores. Es por ello, en algunas ediciones de la Biblia el último libro del A.T. Para algunos autores es un a modo de resumen final del decir profético: Predilección de Yavé por su Pueblo Israel. Denuncia de una religión cada vez más vacía de contenido y más interesada hasta el punto de pervertir lo más sencillo de ella como son los sacrificios y ofrendas al Señor.
Denuncia el quebranto de la fidelidad conyugal, sobre todo el nuevo matrimonio con mujeres paganas. Pues así resulta que la infidelidad a la mujer primera, algo que ‘el Señor aborrece’ (2,16), es infidelidad a Dios (su descendencia, de mujer pagana, se apartará de Dios).
En el siguiente capítulo denuncia de nuevo la poca generosidad del pueblo con su templo a fin de mantenerlo con dignidad en sus estructuras y en el culto y servicios que conlleva.
Finalmente, como es propio de todos los profetas, el pueblo es invitado a la conversión, No se dice que todo el pueblo se convertirá o será condenado, sino que cada uno tomará su camino. Ya ha llegado en Israel el tiempo de la responsabilidad personal ante el Señor. Así se dice “Los devotos de Yahvé hablaron entre sí. Yahvé escuchó con atención y se escribió en su presencia un libro en memoria de los devotos de Yahvé que honran su nombre” (3,16). Con estos “el Señor será indulgente como es indulgente un padre con el hijo que le sirve” (3,17).
Ya no correrá todo el pueblo la misma suerte, sino que cada uno elige su camino y, con ello, elige la suerte final que le aguarda, como concluye el texto que hoy leemos de Mal 3,19-20a.
TOMÁS RAMÍREZ
tomas@dabar.net
tomas@dabar.net
SEGUNDA LECTURA
En la exhortación práctica final de este escrito, el autor imita al propio Pablo, tomando quizás prestadas ideas y aun expresiones de sus cartas auténtica. Entre ellas destaca el tema de la imitación del Apóstol, que se había puesto de ejemplo vg. en 1 Ts 2,9 en el asunto que se toca en las líneas siguientes, el trabajo serio.
Porque, efectivamente, entre los destinatarios de la carta hay quienes no trabajan si bien parecen estar muy ocupados metiéndose en lo que no les toca. La frase “muy ocupados en no hacer nada” del v. 11 no es demasiado clara de traducir, pero parece que se refiere a que esas personas se entremeten en asuntos ajenos, lo cual sería verosímil en gente ociosa, la cual, por otra parte, tendría que vivir a costa de otros.
En todo caso lo importante es la necesidad de trabajar. Quizás el no hacerlo en aquel momento era por la espera en la inminente llegada del Señor y consiguiente final de la historia. Sería una forma equivocada de entender la escatología y extraer de ella consecuencias desacertadas por estar fuera de la realidad humana.
Pero sea por lo que fuere, y aun teniendo presente que – en la opinión de algunos – las cosas iban a terminar pronto, hay que trabajar. De modo sencillo y directo, un tanto apodíctico, se dice a tales personas que, si no quieren trabajar, tampoco coman. Lo cual parece un dicho de carácter popular y de común sensatez humana. No se dan motivaciones especiales sino se apela a la experiencia humana general. Es una muestra de cómo la exhortación cristiana y el cristianismo en general no están reñidos con el sentido común.
FEDERICO PASTOR
federico@dabar.net
federico@dabar.net
EVANGELIO
1. Aclaraciones al texto
V.5 Belleza del templo por la calidad de la piedra y los exvotos. El templo era exclusivamente el de Jerusalén. No había otro. Seña de identidad nacional y religiosa de los judíos. Espléndido, deslumbrante, majestuoso. Los exvotos a los que se hace referencia eran piezas de gran valor ofrecidas por príncipes y particulares. Era proverbial la vid dorada de Herodes, con racimos de la altura de un hombre.
V.7 Maestro. Con autoridad para enseñar.
V.8 Usando mi nombre. Haciéndose pasar por Mesías. El momento está cerca. Mejor traducción: Ha llegado el momento. V.9 El final en referencia al fin del mundo.
Vs.12 y 17 Por causa de mi nombre. Por causa de mi, por ser seguidores míos.
V.14 Haced propósito de no preparar vuestra defensa. Una traducción más gráfica en consonancia con el original griego podría ser ésta: meteos en la cabeza que no vais a necesitar preparar vuestra defensa.
V.18 Ni un cabello de vuestra cabeza perecerá. Expresión proverbial indicando protección segura.
V.19 Perseverancia. Ha de entenderse en el sentido de aguante y resistencia en la adversidad. Salvaréis vuestras almas: os ganaréis a vosotros mismos, ganaréis vuestra vida. Una buena traducción de este versículo podría ser la siguiente: Manteneos firmes y alcanzaréis la vida.
2. Texto
Jesús certifica la gravedad de la situación y la tipifica en el Templo: todo él será destruido. La mirada de Jesús se adentra en el porvenir de un pueblo que estaba dando síntomas de fanatismo y de violencia. La mirada atenta y penetrante de Jesús ve el desastre que se avecina sobre Israel.
Pero ante las lógicas preguntas por el cuándo y la señal, Jesús libera a sus palabras de toda especulación sobre el final de los tiempos: Que nadie os engañe. Eso tiene que ocurrir primero. El final no vendrá en seguida.
El interés de Jesús en este texto no es el final de los tiempos sino el duro destino de sus discípulos en el intermedio, mientras ese final llega.
Un intermedio dibujado con crudo realismo: guerras, revoluciones, catástrofes naturales, hambres, epidemias. A este marco general Jesús añade situaciones propias y específicas de sus discípulos por el solo hecho de serlo, por causa de mi nombre, repetido dos veces: persecuciones, juicios, cárceles, traiciones familiares mortales, odios.
El discípulo se encontrará en la tesitura de tener que dar testimonio en los tribunales a favor de Jesús. Todo el empeño de Jesús es dar ánimos a ese discípulo prometiéndole su apoyo y protección explícitos (yo os daré palabras y sabiduría; ni un cabello de vuestra cabeza perecerá) e invitándole a resistir, a no sucumbir, a ganar su vida incluso cuando sea condenado a muerte.
3. Comprensión actualizante
Texto impresionante de realismo y cariño: Jesús volcado en apoyo y defensa de los suyos.
Con la seguridad y la certeza de este apoyo, los discípulos de Jesús son referente de esperanza en el mundo, porque ni saben de miedos ni de cobardías ni viven desde el desamparo o la indefensión. Porque cuentan con Jesús, los discípulos de Jesús viven con perseverancia, con constancia, sin discursos retóricos; tienen la espontaneidad y el frescor del Espíritu de Jesús.
ALBERTO BENITO
alberto@dabar.net
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NOTAS PARA LA HOMILIA
DISTRACCIONES EN EL CAMINO
Lucas tiene obsesión en transmitirnos la visión que de la vida ha recibido en la tradición judía y que él ha visto realizada en Jesús. La vida es un camino que recorremos, en compañía de otros, salpicado de dificultades, sembrado de piedras, lleno de subidas, más que de bajadas, y dirigido hacia un horizonte lejano, inabarcable y, a veces, dudoso.
El recorrido, a su vez, tiene vistas entretenidas que igual despiertan el ánimo como lo adormecen, invitando a su contemplación extasiada. Muchas cosas parecen hechas para hacer pensar, pero las leyendas surgidas en el tiempo y los comentarios de los transeúntes las han convertido en expresiones anímicas de entusiasmo o de frustración.
El símbolo de la belleza y la referencia de la seguridad del futuro, para un judío, era su templo. Era la culminación de todos sus sueños, el adelanto del final, la seguridad en medio del tiempo que pasa y se pierde, la firmeza frente a la tentación de cambiar continuamente de parecer o de convicciones y valores. Sus piedras sillares debían ser el rostro externo de lo perenne que resiste, la imagen ideal de las aspiraciones sentidas. El no va más del camino, de la vida, de la religión.
Habían hecho del continente, con su apariencia, grandiosidad y belleza dulcificada y controlada, la cara radiante del contenido. El símbolo que refiere y señala a lo representado lo habían divinizado y confundido con la realidad. De sus tradiciones culturales y de sus aspiraciones políticas habían querido hacer una muestra de ilusión y de expresión revanchista.
Todo eso, que nosotros también cultivamos, puede venirse abajo. Todo aquello a lo que nos agarramos para alentar ilusiones que levanten los ánimos y nos hagan soñar con futuros proyectados según nuestros deseos, todo lo ilusorio, puede derrumbarse y caer en un plis plas.
UN RETO: SABER EN QUIEN CONFIAR
Hay que tener cuidado con aquello en lo que proyectamos nuestro futuro. Puede ser tan frágil como nosotros, tan transitorio como nuestro paso por la vida, tan efímero como los cohetes de la fiesta, tan volátil como el sueño de una noche de verano, tan firme como una pluma de ave sometida a la fuerza del viento.
El sentido de la belleza, si ha de ser expresión de nuestra realidad presente y futura debe tener algo más que firmeza y mucho más que finitud. Si su cualidad es representar nuestra condición histórica y nuestra esperanza profunda y convencida de un futuro pleno en el que todo el recorrido de la vida tenga un final feliz, no puede quedarse sólo en un sentido superficial de lo bonito ni en un sentido fatal de fracaso.
El caminante de la vida necesita ir descubriendo, junto a las pequeñas ilusiones ficticias que pueden entretenerle un rato, los agarraderos fuertes y definitivos en los que apoyar su cansino y vacilante pie. El suelo en el que echar sus pasos ya cansados de tanto recorrido.
Y entonces descubre a Dios. No a su dios, sino al Dios que se desvela, descubre y manifiesta en el recorrido vital, en las esperanzas profundas, en los anhelos más personales y comunitarios, en las necesidades grandes de los desheredados de la tierra, en las expresiones crudas de la belleza artística, no consumista.
Dios nos ha mandado a su Mensajero para que, con su Palabra, nos diga y dirija a la Verdad de la Vida. Tendremos que hacer un esfuerzo por descifrarla y vivirla. Ganaremos mucho, porque orientará nuestra confianza hacia quien únicamente la merece. Dios.
JOSE ALEGRE ARAGÜES
pepe@dabar.net
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PARA CONSIDERAR Y REFLEXIONAR EN GRUPOS
Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas
(Lc 21, 19)
Preguntas, cuestiones y sugerencias
-¿Hay que hacer algo muy especial para dar sentido cristiano al trabajo?
-¿Es conforme al plan divino el no hacer nada en absoluto?. ¿Porqué no?
-Trabajo como “castigo”. ¿Es ése realmente el sentido del texto de Génesis 3,11?
PARA LA ORACION
Es difícil, Señor, mantenerse despierto y no dejarse seducir por los muchos señuelos que, en la vida, atraen nuestra atención con las artes de la publicidad y las ilusiones de las promesas demagógicas. Centra nuestra vista en lo importante, haznos generosos y desprendidos en los templetes que nos construimos. Contágianos de tu confianza y haznos siempre portadores de la verdadera y profunda esperanza que ayuda a luchar y vivir.
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Tu insistencia en el pan y el vino es tu pedagogía en nuestra confusión y despiste. El pan y el vino que constituyen la representación esencial de una vida dura de búsqueda de lo necesario, son el regalo de tu propia presencia en las luchas del vivir cotidiano y hacen presentes también a todos los que trabajan, necesitan y esperan.
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Es un regalo grandioso contar contigo en los pasos de la vida y en los momentos de las decisiones. Eres un gran regalo como compañero infatigable, mensajero de esperanza y guía en los muchos cruces que confunden nuestra orientación. Eres un gran regalo con tu Palabra de aliento, de ánimo, de comprensión y de perdón. Eres un gran regalo como animador de esfuerzos, removedor de compromisos y recordatorio de los débiles que nos necesitan. Eres un gran Dios, afectuoso y cercano, pedagogo y exigente, educador y amigo. Eres, de verdad, un buen Dios. Por eso, con toda la alegría del mundo, porque podemos contar contigo, estamos muy agradecidos y te lo expresamos.
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Nuestra dicha es saber que nos acompañas. Nuestra alegría escuchar tus palabras de ánimo. Nuestra confianza porque no nos abandonas aunque, a veces, parezca que no te sentimos. Haz que nuestro mundo pueda sentir la dicha de tu fe, tu amor y tu esperanza. Entonces será un mundo mejor, más humano.
LA MISA DE HOY
MONICIÓN DE ENTRADA
Aunque los cristianos de ahora no somos muy versados en liturgias y ciclos, deberíamos saber que estamos celebrando los últimos domingos del año religioso. Dentro de pocas fechas comenzaremos a preparar la Navidad, que marca el comienzo del nuevo año litúrgico. Así como el año astronómico termina en Navidad, el año cristiano comienza entonces.
Por eso, estos domingos nos hablan de lo que parece el final de la historia, del tiempo en el que transcurren nuestras historias personales. También aquí hay una diferencia entre el final astronómico del mundo y el final histórico de cada uno de nosotros en el que percibimos los grandes cataclismos de nuestra realidad personal. Es entonces cuando conviene tener profundas actitudes de confianza en quien únicamente merece la pena ponerla.
ACTO PENITENCIAL
-Tú que nos invitas a vivir con confianza y realismo. Señor, ten piedad
-Tú que eres el compañero de viaje que das esperanza. Cristo, ten piedad
-Tú que transmites aliento, ánimo y ganas de seguir. Señor, ten piedad
Dios nos anima siempre a seguir en la vida con los ojos abiertos y con la confianza puesta en un futuro de amor, perdón y plenitud.
MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA
Un profeta que se llama Mensajero siente la necesidad de despertar la esperanza de su comunidad, agobiada por el cansancio de una vida sin justicia y sin cambios. Dios no deja las cosas como nosotros las construimos, sería demasiado terrible conformarnos con un mundo de desigualdades. Siempre habrá un futuro.
SALMO RESPONSORIAL (Sal 97)
El Señor llega para regir los pueblos con rectitud.
Tañed la cítara para el Señor, suenen los instrumentos: con clarines y al son de trompetas, aclamad al Rey y Señor.
El Señor llega para regir los pueblos con rectitud.
Retumbe el mar y cuanto contiene, la tierra y cuantos la habitan; aplaudan los ríos, aclamen los montes al Señor, que llega para regir la tierra.
El Señor llega para regir los pueblos con rectitud.
Regirá el orbe con justicia y los pueblos con rectitud.
El Señor llega para regir los pueblos con rectitud.
MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA
Cuando hay crisis de trabajo es un sarcasmo que haya quienes se aprovechan de las subvenciones para los desempleados robándoselo a quienes las necesitan. El trabajo es para la vida, también para la solidaridad y el servicio comunitario.
MONICIÓN A LA LECTURA EVANGÉLICA
Para Lucas, como para nosotros y para Jesús, la vida es un camino hacia un horizonte posible y necesario. En él hay mucho en juego. Muchas distracciones. Muchas ilusiones. ¿Hay esperanza? ¿En quién confiar?
ORACIÓN DE LOS FIELES
Las necesidades y problemas del mundo nos abruman, por eso buscamos algo con qué ilusionarnos. Dios nos invita a no olvidar nunca la realidad.
-Por quienes nos reunimos en esta comunidad que quiere cultivar la esperanza y despertar la solidaridad, para que vivamos de acuerdo a nuestra fe. Roguemos al Señor.
-Por la comunidad de los creyentes cristianos presente en el mundo entero, para que seamos portadores de reconciliación, perdón y ánimo. Roguemos al Señor.
-Por los más necesitados de la tierra, presentes con Dios en el pan que vamos a consagrar, para que sean el centro de nuestra celebración y de nuestra preocupación. Roguemos al Señor.
-Para que los jóvenes descubran la importancia de sentir a Dios como compañero del viaje de la vida. Roguemos al Señor.
-Por los pueblos que deben decidir su situación y sus gobernantes, para que lo vivan con seriedad y solidaridad. Roguemos al Señor
-Por quienes viven más agudamente las consecuencias de la crisis y su situación se alarga sin salida. Roguemos al Señor.
Oración: Dios, Padre bueno, mira nuestra súplica y ayúdanos a encontrar las motivaciones que puedan empujarnos a trabajar contigo en hacer un mundo más sensible y humano. Por Jesucristo Nuestro Señor.
DESPEDIDA
Tenemos la suerte de vivir la fe en una comunidad que repite y celebra la esperanza. En ella encontramos las ayudas para seguir caminando. Le damos gracias a Dios y vamos a tratar de hacerles llegar a otros las motivaciones que nos reaniman.
CANTOS PARA LA CELEBRACION
Entrada. Queremos construir una ciudad en paz (1CLN-732); Cristo nos une en torno a su altar (disco “15 Cantos para la Cena del Señor”); Somos un pueblo que camina (1CLN-719).
Salmo. Aleluya, el Señor es nuestro rey (1CLN-515).
Aleluya. Canta aleluya al Señor.
Ofertorio. Padre eterno (1CLN-H 1)
Santo. De Aragüés (1CLN-I 2).
Comunión. Alabad al Señor; El Señor es mi fuerza; Cerca está el Señor (1CLN-731); Te conocimos (2CLN-O 25).
Final. Entre tus manos (1CLN-65)
Director: José Ángel Fuertes Sancho •Paricio Frontiñán, s/n• Tlf 976458529 Fax 976439635 • 50004 ZARAGOZA
Tlf. del Evangelio: 976.44.45.46 - Página web: www.dabar.net - Correo-e: dabar@dabar.net
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